Estudiar en el extranjero es una experiencia enriquecedora, pero también puede ser desafiante adaptarse a un nuevo entorno.
El estrés académico es una realidad para muchos estudiantes universitarios. Aprender a gestionarlo es esencial para mantener tu salud mental y rendimiento académico.
La tecnología está cambiando rápidamente el panorama educativo, y las universidades no son la excepción.